Cuando volvía de la playa

|

Ahora que se acerca el veranito me ha dado un ataque de nostalgia cayéndoseme una lagrimilla (bueno un par o tres) al recordar uno de los momentos más entrañables de mi niñez: cuando degustaba el magnífico y suculento arroz con pollo de mi madre mientras veía las series, que ponian en TVE-1, tras una mañana de rebozamiento arenoso y enjuagues marinos en la playa.

Sirva este post para rendir un calido homenaje a esas viejunas series de mi infancia.

1. Orzowei
La serie más freak jamás creada. Imaginaros un rubiales vestido con una piel de leopardo y dando botes por la selva africana. Ese era Orzowei "lalalalalalalaaaaa", que si no tuvo suficiente con parecer una versión cutre de Tarzán, tambien tuvo que soportar que Enrique del Pozo (sí, el de Enrique y Ana) cantara el tema de la serie en castellano.




2. Sandokan
Rindamos pleitesia al macho por excelencia. Mucho antes de que llegara Magnum deleitando a las féminas con su peludo pecho palomo, hubo un tiempo en que un señor barbudo, con turbante y de oficio pirata reinaba en los altares de todas ellas. Ese hombre, de mirada penetrante, era Sandokán, el tigre de Malasia.



3. La casa de la pradera
Ñoña como ella sola. Bucólicas situaciones trufadas de dulces miradas y perennes sonrisas. Michael Landon se labró aquí su camino hacia el cielo.



4. Verano azul
Que decir de esta serie tan repetida, repuesta y reemitida. Imborrables de la memoria los momentos de la muerte de Chanquete y el primer tomate de Bea.
NOTA: Que alguien me arranque los ojos si alguna vez la vuelven a emitir por televisión, por favor.


2 comentarios:

Anónimo dijo...

Entiendo perfectamente a Ana. Tras compartir carrera musical con semejante individuo yo habría pedido un cambio de identidad al FBI.

Horrabin dijo...

jojojo Imagino que a Orzowei le debió pasar algo parecido.